ECC Ediciones, en su iniciativa por recuperar algunas de los mejores cómics de autores en lengua hispana como Fernando de Felipe, Juan Giménez y Ricardo Barreiro (As de Pique) o Jesús Blasco, ha publicado recientemente Clarke & Kubrick, de Alfonso Font. En este volumen se han incluido todas las historias que el autor catalán realizó de este singular dúo: Espacialistas Ltd., Los Estafadores, El Amo del Mundo y La Reserva de los Locos.
LOS ORÍGENES DE CLARKE & KUBRICK
Clarke & Kubrick vieron la luz por primera vez en Cuentos de un Futuro Imperfecto, una serie de catorce historias publicadas entre los números 22 al 40 de la mítica revista de cómic adulto 1984. En una de esas historias —que no se incluye en este tomo— hicieron su aparición dos curiosos personajes, ingeniero uno y piloto el otro: Stanley y Arthur. En aquel segmento, nuestros protagonistas tenían que lidiar con un ordenador que llevaba el mismo nombre que el desequilibrado ingenio del film de Stanley Kubrick 2001: Una Odisea del Espacio (1968).
No fue hasta más tarde, en 1982, cuando Alfonso Font se decide a otorgar a ambos personajes serie propia, aunque esta vez en la revista Rambla, precisamente en su primer número. Stanley & Arthur pasan a llamarse Clarke & Kubrick, para hacer aún más patente la analogía con tan grandes genios del cine y la ciencia ficción. Los dos personajes responden con fidelidad al estereotipo del aventurero espacial del cine y series de ciencia ficción de los 80: malhablados, bravucones, pendencieros, desaseados, irónicos y mordaces. Sin embargo, ambos hacen gala de una honradez y un particular código de honor que los distingue del resto de personajes.
Lo primero que sorprende del cómic de Alfonso Font es la verborrea que despliegan ambos personajes. Hoy en día, cuando los bocadillos se han visto reducidos a su mínima expresión, leer un cómic con tanto texto sorprende... gratamente. No es texto de relleno, sino conversaciones chispeantes en las que ambos protagonistas hacen gala de todo su ingenio y agudeza verbal. Este bromance entre Clarke & Kubrick se ve acentuado por sus diferentes personalidades. Mientras Kubrick, el piloto, es impulsivo e irracional, Clarke, el ingeniero de vuelo, es calmado y reflexivo. Este acusado contraste de personalidades da pie a muchas situaciones divertidas.
CLARKE & KUBRICK: ESPACIALISTAS LTD.
En la primera historia del volumen publicado por ECC Ediciones, Espacialistas Ltd., vemos el primer desencuentro entre Clarke & Kubrick con una poderosa corporación. En esta ocasión, son obligados a desactivar una bomba orbital que amenaza a las colonias marcianas. Estamos en un siglo XXI en el que la exploración espacial ha permitido llegar no solo a los planetas solares, sino a mundos a años luz de distancia. Las grandes corporaciones supraestatales serán otro elemento recurrente en las historias de Clarke & Kubrick.
Una de las historias más divertidas de Espacialistas Ltd. es «¡Oh, dioses!». En ella, los dos protagonistas trabajan eventualmente en una antena espacial. Esta historia da la vuelta a las famosas leyes de la robótica de Isaac Asimov con un desenlace inesperado. En «Proyecto Uve», Alfonso Font utiliza el recurso de la realidad virtual para criticar las maniobras de las empresas para escatimar derechos al trabajador. «El Ulapo Trideseico» pone punto y final a esta parte del tomo. En esta historia, un alienígena aparentemente omnipotente concederá a los protagonistas sus deseos más inalcanzables. Por cierto, el parecido del «ulapo» es calcado al alienígena que aparece en la película Los Nuevos Extraterrestres (1983), de Juan Piquer Simón, uno de los rip-off surgidos a rebufo de E. T. El Extraterrestre (1982). ¿Casualidad?
CLARKE & KUBRICK CONTRA EL SISTEMA
Los Estafadores es el título del segundo arco que Font dedicó a su peculiar dúo. En este hilarante relato, Clarke & Kubrick son los emisarios de una gran corporación dispuesta a quedarse con las preciosas gemas que abundan en un lejano planeta a cambio de baratijas (te suena, ¿no?). Los nativos del planeta, aparentemente atrasados e ingenuos, resultan ser unos listos que, inevitablemente, terminan timando a nuestros protagonistas. Por si fuera poco, ambos conocen a una preadolescente que ha hecho del robo y el timo su modus vivendi en los bajos fondos de la ciudad. Es un personaje que solo aparece en esta parte. Sinceramente, esta historia se hace un poco larga para lo que Font nos quería contar.
El Amo del Mundo es una loca historia sobre científicos locos y viajes temporales. En ella, Clarke & Kubrick se ven transportados primero al futuro cercano, para ser enviados luego en una misión crucial hasta la Italia del siglo XV. Precisamente, a la localidad donde reside Leonardo Da Vinci. A partir de aquí asistimos a una serie de gags basados en los encuentros entre Da Vinci y el par de «espacialistas», con un final realmente inspirado.
La Reserva de los Locos pone punto y final al volumen que recoge las historias que Alfonso Font dedicó a Clarke & Kubrick. En esta aventura, ambos amigos reciben el encargo de transportar un cargamento de medicamentos a un planeta transformado en institución mental. A su llegada, ambos deben lidiar con una asfixiante burocracia que les hace dudar si realmente no han aterrizado, sin saberlo, dentro de los muros de la institución mental. En esta historia, Font se ceba especialmente no solo con la administración mastodóntica, sino también con la institución militar, a la que retrata como algo caduco y absurdo.
CLARKE & KUBRICK, UN CÓMIC DEL FUTURO SOBRE EL PRESENTE
En definitiva, Clarke & Kubrick es un cómic que, más que de ciencia ficción, emplea el género y sus convenciones como pretexto para lanzar al lector una andanada de crítica social poco o nada disimulada. Los inicios de la década de los 80 fueron años en los que la democracia en España aún no estaba asentada y muchos de los derechos de los que disfrutamos hoy en día simplemente no existían. Clarke & Kubrick, más que un posible futuro, lo que retrata es la propia sociedad en la que se desenvolvía el autor, tanto para lo bueno como para lo malo.
En lo que respecta al apartado gráfico, tenemos aquí a un Alfonso Font en estado de gracia. Tanto los protagonistas como el resto de personajes están perfectamente retratados viñeta a viñeta, con una variedad de expresiones, gestos y posturas que demuestran un dominio magistral de la figura humana. Los paisajes, naves, vehículos y demás parafernalia tecnológica parecen realistas y plausibles, contrastando con el tono decididamente cómico de muchas de las historias. Choca, sin embargo, lo poco que acertó Font al vaticinar cómo sería nuestro siglo XXI. El color, por otro lado, es otro elemento de la narrativa gráfica de Font que realza y embellece todavía más este espectacular cómic.
Clarke & Kubrick es uno de los más claros ejemplos de la ciencia ficción que se publicaba en las revistas de cómics adulto de los 70 y 80. Lamentablemente desaparecidas, estas revistas fueron el crisol de autores como Alfonso Font, ahora recuperados tanto para los nuevos lectores ávidos de aire fresco como para aquellos que miran con nostalgia un pasado no mejor, pero posiblemente más sencillo.
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