ECC Ediciones ha publicado recientemente OMAC: Un Ejército de un Solo Hombre, con guion y dibujos del gran Jack Kirby. Es la primera vez que los aficionados españoles podemos disfrutar de esta obra a todo color y en su formato original. La versión editada en 2007 por Planeta en su coleccionable Clásicos DC era en blanco y negro y de tamaño reducido. En esta ocasión, los colores originales han sido reconstruidos (que no recoloreados), se han incluido todas las portadas y una introducción de Mark Evanier, guionista y buen conocedor de Kirby.
Tras su vuelta en 1971 a DC Comics, Jack Kirby revoluciona sus colecciones con un buen número de grandes ideas. Una de ellas es OMAC (One Man Army Corps), una serie de tan solo nueve números que, desgraciadamente, Kirby dejaría inconclusa. De hecho, los editores debieron incluir una viñeta final para, digamos, atenuar el gran cliffhanger con el que culminaba el último número. Entonces, ¿desvirtúa este hecho esta obra de Kirby? En absoluto. Pero veamos antes de qué va la historia.
OMAC: UN EJÉRCITO DE UN SOLO HOMBRE
OMAC se ambienta en un futuro no muy lejano en el que el desarrollo tecnológico ha alcanzado cotas en algunos casos inquietantes. Por un lado, androides y fembots capaces de sustituir a los humanos y usados como acompañantes... y Dios sabe qué mas. Por otro, sofisticado armamento usado, en muchas ocasiones, para desatar el caos por señores de la guerra como el Mariscal Kafka. Irónicamente, los ejércitos se han abolido, ya que suponen una amenaza para la estabilidad mundial mucho mayor que los peligros a los que deben hacer frente.
Para contener a toda esta serie de tiranos, sabios locos y delincuentes tecnológicos se instaura la Agencia por la Paz Global. Esta organización, compuesta por hombres sin rostro de todas las naciones, tienen como principal activo a OMAC, un humano potenciado física y mentalmente de increíbles poderes. Tras él se oculta la personalidad de Buddy Blank, un discreto oficinista elegido al azar por la organización para convertirse en superhombre.
LA IMAGINACIÓN DESATADA DE JACK KIRBY
Publicada entre octubre de 1974 y diciembre de 1975, la serie OMAC constituyó todo un catálogo de las ideas más originales de Kirby. En sus páginas se avanzan ideas como las arriba mencionadas, pero también se alude a teléfonos de bolsillo, ciudades enteras alquiladas por placer por multimillonarios o aparatos de realidad virtual. Pero quizás la invención más original de Kirby en este cómic sea el Hermano Ojo, un satélite en órbita permanentemente sincronizado con OMAC y fuente de todo su poder.
A pesar del poco éxito de la serie entre los lectores de la época, los conceptos introducidos por Jack Kirby en este cómic permanecerían en diversas colecciones de DC. Por ejemplo, el propio ingenio orbital jugaría un papel crucial en el evento en siete parte Crisis Infinita (2005), publicado por ECC Ediciones en un tomo recopilatorio. Para los completistas que deseen hacerse además con las series secundarias del evento, también están disponibles los primeros dos tomos (de seis) de Crisis Infinita XP.
La historia planteada por Kirby es sencilla. Todos los números consisten en la lucha interminable del héroe contra una serie de malhechores, la mayoría ultrapoderosos. La premisa de fondo es que, a pesar de los avances alcanzados por la humanidad, esta parece estar siempre al borde de la destrucción. Quizás fuera un reflejo de los tiempos en los que fue escrito este cómic.
EL ARTE DE JACK KIRBY EN OMAC
Si bien la historia que Kirby nos presenta en OMAC no sea de las que marcaron época, sí lo es su dibujo. Estamos ante un artista que llegaba procedente de Marvel con ganas de controlar sus creaciones en DC. De ahí que asistamos en este cómic ante el derroche imaginativo al que El Rey nos tenía ya acostumbrados, como en la colección Superpoderes, también editada por ECC. Espléndidas splash pages, viñetas cargadas de dinamismo, imaginativos diseños y máquinas, así como criaturas de lo más extrañas son la marca de la casa de Jack Kirby. La labor de los entintadores es también sobresaliente, tanto Mike Royer (números 1 y 9), como Bruce Berry, que se encargó del resto de la serie.
EL LEGADO DE OMAC
El abrupto final de OMAC coincide con el regreso de Jack Kirby a Marvel. No obstante, el legado de esta serie en el Universo DC se materializaría años después con la recuperación de uno de sus protagonistas, Buddy Blank. Este reaparecería en la colección Kamandi, por aquel entonces guionizada por Dennis O'Neil. El personaje vuelve a surgir en 1978 de la mano de Jim Starlin, primero en Kamandi y posteriormente en la colección Warlord, una serie que esperemos pronto sea recuperada como se merece por ECC Ediciones. ¡Ya tienen idea para el próximo crowdfunding!
Otro de los admiradores de Jack Kirby, John Byrne, publicaría en 1991 la miniserie OMAC. Se trata de otro de esos cómics que merecería la pena reeditar. En estos cuatro prestigios, Byrne intenta atar los cabos sueltos dejados por Kirby tras su huida a Marvel. También se retoman antiguos personajes, como el villano Mr. Big, quien fuera presentado en el número dos de la colección original.
Desde entonces, OMAC ha sido referenciado y homenajeado en varias colecciones de DC Comics, como en la excepcional Kingdom Come (1996) o en Young Justice 1.000.000 (1998), de Peter David. Lo más reciente es la ya mencionada miniserie Crisis Infinita de 2005, así como versiones más o menos cercanas al original, como los ReMAC de Batman y los Outsiders.
En definitiva, si bien no estamos ante lo más destacado de Jack Kirby como guionista, OMAC supone todo un despliegue de imaginación y dinamismo. Se nota que El Rey intentó trasladar al lector ideas y conceptos sobre los retos del futuro, los cuales se vislumbraban ya a mediados de los setenta. Si eres fan de Jack Kirby, este tomo no puede faltar en tu biblioteca. De otro autor diría que no hay por dónde cogerlo, pero tratándose de Kirby es casi oro puro.
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