Star Trek: Discovery, 5 aciertos y 6 errores de la temporada 3

La plataforma CBS All Access ha confirmado que habrá una cuarta y una quinta temporada de Star Trek: Discovery, las cuales se rodarán back-to-back, es decir, a la vez. Sin embargo, si fuera por muchos fans, no creo que la serie se alargara más de la temporada tres que acaba de finalizar. Aunque con algunos aciertos, el balance de la tercera temporada de Star Trek: Discovery ha sido bastante desigual. Las aventuras de la tripulación de la Discovery en el siglo XXXII nos ha dejado algunos momentos memorables... pero también otros de vergüenza ajena. A continuación, los aciertos y los errores de esta tercera temporada de Star Trek: Discovery.

ACIERTO: CLEVELAND «BOOK» BOOKER

El tremendo salto temporal de la serie, nada menos que al año 3188, implica la aparición de nuevos personajes recurrentes. Uno de los principales es Cleveland "Book" Booker (David Ajala), básicamente un contrabandista. Es el primer ser que Michael Burnham (Sonequa Martin-Green) encuentra tras su desplazamiento temporal. El personaje tiene carisma y desde el inicio es evidente que los guionistas tiene planeado para ambos una relación de carácter romántico. No obstante, esta no se hace evidente hasta bien entrada la temporada, probablemente para no lastrar el desarrollo de la historia.

ERROR: LA QUEMA

En este lejano futuro, el dilitio, el elemento que proporciona energía a los motores de curvatura, casi ha desaparecido. Un evento cósmico conocido como La Quema dejó inerte prácticamente todo el dilitio de la galaxia, llevándose por delante a casi toda la Federación. En este tercera temporada, la Federación Unida de Planetas es una sombra de lo que fue, con solo un puñado de naves y encerrados en una burbuja (literalmente). La Quema es el mcguffin de la temporada, la excusa argumental sobre la que pivotarán todas las tramas. Sin embargo, la causa de este cataclismo cósmico es un deus ex machina de manual. Su origen, un mutante kelpiano, es totalmente inverosímil, sobre cómo provoca tanta destrucción, algo que se despacha en apenas dos frases.

ACIERTO: OSYRAA

Uno de los aciertos de la temporada ha sido su principal villano, la despiadada Osyraa, interpretada con solvencia por Janet Kidder. Sin klingons, terranos ni inteligencias artificiales asesinas, la historia demandaba un nuevo tipo de villano. La sobrina de Margot Kidder (sí, la Lois Lane de Superman) interpreta a la líder de la Cadena Esmeralda, un sindicato criminal formado por oriones y andorianos. Lo cierto es que Kidder demuestra que sabe interpretar a personajes con carácter y malencarados, aunque a veces se pase un poco con su eterno rictus. Pero, tras un buen desarrollo a lo largo de la temporada, es liquidada por los guionistas de la manera más burda y sin sentido. Un desperdicio para un personaje con tanto potencial.

ERROR: LA MARCHA DE PHILIPPA GEORGIOU

El personaje interpretado por Michelle Yeoh jugó un papel clave en la anterior temporada. No obstante, en la tercera, los guionistas parecen no haber sabido que hacer con él. Philippa Georgiou ha sido reducida a un personaje gruñón e impresentable, aunque muy carismático. Desde su llegada a la serie ha sido el perfecto contrapunto a la amabilidad y saber estar de los personajes del universo Star Trek, una especie de marca de la casa común a todas las películas y series. Sin embargo, desde el principio de la temporada se veía de lejos que los guionistas pretendían desembarazarse de ella, algo que finalmente ocurre de la forma más tonta, como tantas y tantas cosas en esta tercera temporada. Se agradece, sin embargo, la forma en que ocurre la despedida, todo un homenaje al episodio de la serie original La Ciudad al Fin de la Eternidad, el número 29 de la primera temporada. El guion original de Harlan Ellison de aquel mítico episodio se trasladó recientemente al cómic con el título La Ciudad al Borde de la Eternidad, cuya reseña puedes leer aquí.

ACIERTO: CHARLES VANCE

El actor israelí Oded Fehr no es un desconocido para los fans de la ciencia ficción. A él debemos personajes tan carismáticos como Ardeth Bay en La Momia (1999) y su secuela o el Dr. Carlos Olivera en tres de las películas de la saga Resident Evil. En Star Trek: Discovery encarna al Almirante en Jefe Charles Vance (¿un guiño al escritor de ciencia ficción Jack Vance?), un tipo en principio algo estirado e intransigente pero que evoluciona positivamente a lo largo de la temporada. Lástima que los penosos guionistas de Discovery echen a perder todo lo logrado por este personaje con una decisión final que va contra toda lógica, la humana y la vulcaniana.

ERROR: ADIRA Y GRAY

Mi pregunta es: ¿qué han aportado a la trama de esta temporada los personajes de Adira (Blu del Barrio) y Gray (Ian Alexander)? En mi opinión, nada de nada. Cuando se estaba gestando la tercera temporada fue anunciado a bombo y platillo que, entre los nuevos personajes, habría una persona no binaria. Esa persona ha resultado ser Adira, una adolescente terrestre con una innata capacidad para resolver problemas tecnológicos. Adira se une rápidamente a la tripulación de la Discovery en calidad de ayudante de Stamets (Anthony Rapp), con quien tiene algún que otro roce a causa del uso de los pronombres... A pesar de que el personaje despierta un gran entusiasmo en parte del fandom trekkie, yo lo encuentro soso, vacío e intrascendente. Su ausencia (y la de su media naranja fantasmal) no habría cambiado prácticamente nada de lo ocurrido esta temporada.

ACIERTO: LOS GUIÑOS Y HOMENAJES

Afortunadamente, los guionistas de Star Trek: Discovery también tienen su corazoncito, y de vez en cuando son capaces de dejar easter eggs, guiños y homenajes para que los fans de diviertan descubriéndolos. Por ejemplo, el homenaje a la película de Rutger Hauer Peligrosamente Unidos (1991) al que asistimos en el episodio sexto, titulado Scavengers. Como en aquella película, los presos que intentan escapar del perímetro donde están recluidos pierden la cabeza gracias a un explosivo alojado en su cuello. También hay un guiño a Jungla de Cristal (1988), cuando Michael Burnham corre descalza por los pasillos de la nave intentando detener casi en solitario a Osyraa. Hay muchos más huevos de pascua escondidos por toda la temporada que solo un verdadero trekkie podría descubrir. Quizás les dediquemos su propio post.

ERROR: EL EXCESIVO PROTAGONISMO DE MICHAEL BURNHAM

Sí, sé que Michael Burnham es la protagonista de la serie, pero ¿por qué todo debe girar en torno a ella? ¿Por qué es siempre la que debe salvar el día? El personaje de Sonequea Martin-Green ha alcanzado en esta temporada su cénit como protagonista absoluto del show. Para los guionistas de la serie, ninguna situación puede ser resuelta sin su participación. Las series y películas de Star Trek siempre han sido corales, con el peso de la acción repartido en un grupo de personajes recurrentes, no en solo uno de ellos. 

ACIERTO: EL PERSONAJE DE DAVID CRONENBERG

Quienes amamos el cine de horror y ciencia ficción consideramos a David Cronenberg como uno de los directores más influyentes del siglo XX. Su aparición en esta tercera temporada de Star Trek: Discovery ha sido todo un regalo. Su inquietante presencia como asesor de la Federación se realzaba con una cierta aura de misterio y unas anacrónicas gafas. Los trastornos visuales en el universo Star Trek fueron eliminados por un medicamento, el Retinax V, al que James T. Kirk era alérgico, de ahí que usara gafas para leer.

ERROR: TILLY, UN PERSONAJE CADA VEZ MÁS INCREÍBLE

La alférez Sylvia Tilly (Mary Wiseman) era, en un principio, un personaje simpático y entrañable. En esta temporada, sin embargo, ha pasado a convertirse en increíble. Su meteórico ascenso de alférez a primer oficial, y de primer oficial a capitán de la Discovery es de todo menos plausible. Al menos, los guionistas son consecuentes y hacen que Tilly pierda la Discovery a manos de Osyraa nada más sentarse en la silla del capitán. Cada vez que esta chica aparece en la serie tengo que rozar con el dedo el pequeño saliente que hay bajo el brazo de mi sofá para no desesperarme...

ERROR: EL FINAL DE LA TEMPORADA

Si estás leyendo esto es porque, casi con seguridad, ya has visto la temporada completa. Si no es así, deja de leer de inmediato. En el capítulo once, titulado Su'Kal, descubrimos que el desencadenante de La Quema es nada menos que un kelpiano. Este lleva decenas de años aislado en una nave de la Federación perdida en el centro de una nebulosa. Supuestamente, los genes del kelpiano se combinaron en el útero con las radiaciones emitidas por un planetoide hecho enteramente de dilitio. ¿El resultado? Un kelpiano mutante cuya mayor rabieta originó La Quema y el fin de la Federación. ¿En serio? Por cierto, toda la historia en torno a este kelpiano me recordó un episodio de Star Trek: La Nueva Generación, el octavo de la cuarta temporada, titulado Futuro Imperfecto. En él, la tripulación del Enterprise descubría un joven alienígena que había crecido solo en un planeta acompañado únicamente por unos hologramas...

Posiblemente, esta tercera temporada de Star Trek: Discovery habría ganado mucho si, paralelamente a lo que acontece en el siglo XXXII, asistimos también a lo que sucede a la tripulación que queda atrás en el pasado. Los personajes de Spock, el Capitán Pike y Número Uno tienen reservado su propio spin-off, que se titulará Star Trek: Strange New Worlds, de ahí que no hayamos sabido nada de ellos esta temporada. No obstante, no habría estado mal incluirlos en alguno de los episodios, en lugar de los varios capítulos de relleno de esta temporada. Esperemos que la nueva serie, que comienza a rodarse en Canadá este mes de febrero, nos dé más alegrías que esta agridulce tercera temporada de Star Trek: Discovery.