The Boys, Temporada 2: 3 aciertos y 3 errores de la serie de Amazon Video

Te aviso de que este artículo sobre la segunda temporada de The Boys, la serie de Amazon Video, contiene algunos spoilers. No podríamos haberla analizado de manera fundamentada sin desvelar algunos puntos de su argumento. Quedas avisado. Si bien la primera temporada la colocamos en el podio de lo mejor de 2019, esta segunda nos ha dejado algunas interrogantes. Os analizamos en el siguiente listado lo mejor y lo peor que de la adaptación del cómic de Garth Ennis.

CONTAR CON MÁS PRESUPUESTO QUE LA PRIMERA TEMPORADA

El exitazo que ha sido The Boys para Amazon Prime Video, que parece ir dando palos de ciego en cuanto a oferta aaudiovisual,  ha resultado que abran la chequera. Los efectos especiales que hemos disfrutado en esta ocasión impactan, y mucho. También ayuda a la impresión que genera, ya que el gore es inherente al cómic y aquí no lo han pasado por alto. Por si alguien pensaba que han exagerado lo visto en el cómic que adapta. Distintos escenarios, que amplían el universo de The Boys, es otra gran ventaja de esta decisión.

EL PERSONAJE DE STORMFRONT

Basada también en un personaje del cómic pero de género masculino, Stormfront (Aya Cash) nos reserva la mayor sorpresa. Su arcaica ideología nazi es bien disimulada hasta que pasamos el ecuador de la temporada. Su relación con Patriota, otro que tal baila, también es de lo mejor. La historia de Stormfront nos sirve para ponernos sobre aviso de muchos peligros actuales. Sin necesidad de estos héroes prefabricados.  Un toque de atención desde la ficción sobre lo que estamos viendo a diario en la realidad y del poder de las redes sociales. En todos los sentidos.

El público sigue percibiendo que sus héroes cuidan de ellos. En la realidad y en los cines.

 

PATRIOTA

Un villano del que no puedes apartar la mirada. E, incluso, reconozco que me da algo de pena cuando las cosas le salen tan mal. A pesar, o a causa, de su psicopatía. La relación que intenta establecer con su hijo es destacable. Hace lo que puede con lo que tiene, que no es mucho. Al menos nos saca de la unidimensionalidad del personaje. Tampoco lo pasa bien en la parte sentimental. Su papel de líder de Los Siete lo implica en muchas más cuestiones que a sus compañeros. Como petición, que le hubieran dado un poquito más de humanidad habría beneficiado al personaje. Hasta el genocida más abyecto es capaz de un gesto noble. De todas formas, sostiene gran parte de la serie, gracias entre otras cosas al gran casting y actuación del actor neozelandés Antony Starr (Banshee).

HUGHIE CAMPBELL Y SU DUDOSA UTILIDAD

Lo siento, pero el papel de este chico, Jack Quaid, se me hace repetitivo. No aporta nada y francamente, no sé de qué vive. Ni por qué van cargando con él. Es terriblemente soso y, aunque tenía su motivación en la primera temporada, aquí me parece que todo le viene grande. Lo que hace es aprovecharse de Starlight (Erin Moriarty) que es la que asume el riesgo. Y finalmente, es A-Train (Jessie T. Husher) el que le hace el trabajo. Es bastante pesada la parte en la que el aparece este chico.

En cuanto a Carnicero (Karl Urban), sobre el que recae el papel de héroe de la serie, plantea a una madre que abandone a su hijo. Y se mete en peleas sin sentido por su necesidad de violencia. No parece mucho mejor que contra quienes lucha. 

Hughie me parece un lastre... para el equipo y para el espectador.

EPISODIOS DEMASIADO LARGOS

Los primeros episodios han sido en mi opinión algo pesados. Se enredaban en escenas estáticas llenas de conversaciones que no llevaban a nada. Tampoco la acción hacía acto de presencia. Además, se hacían bastante largos, superando los cincuenta minutos sin necesidad. Mejor sería haber acortado los capítulos sobre unos cuarenta y cinco minutos y darle mucha más agilidad a lo que vemos. Hay que echarle algo de paciencia hasta llegar a lo más interesante.

SE HA DESAPROVECHADO MUCHO A LOS SECUNDARIOS

Un personaje como Queen Maeve (Dominique McElligott) daba para mucho más que para definirla solo por su relación con otra mujer. Lo poco que sale es casi por eso. Merecía más tiempo en pantalla. También otros compañeros, como Profundo (Chace Crawford) o A-Train, merecían más desarrollo de sus tramas. Habría beneficiado la serie. Centrarlo casi todo en Patriota no era necesario. Cambian respecto al cómic lo que va conveniendo, y repartir protagonismo con historias más variadas y trabajadas habría estado bien. Tiempo han tenido.

En definitiva, una segunda temporada que ya no cuenta con el efecto sorpresa de la primera y tiene que establecer la serie. En general, lo ha conseguido.