El guionista y dibujante Eddie Campbell quizás no esté entre los más conocidos entre los autores de cómics, pero si os digo que junto a Alan Moore es el responsable de From Hell, la cosa cambia. Campbell, originario de Glasgow, Escocia, tuvo la oportunidad de realizar una historia de Batman con total libertad, es decir, un Otros Mundos. Como suele ocurrir con los autores británicos, como Morrison o Claremont, no dudan en situar la acción en sus tierras. Además, Campbell elige un periodo histórico de lo más interesante, 1939, justo antes de la II Guerra Mundial. ¿Que nos ofrece esta breve historia autoconclusiva que nos recupera ECC Ediciones?
Ya he mencionado otras veces que los Elseworlds no son mi elección de cómic favorita, especialmente porque en muchos casos se adultera tanto el personaje en cuestión que ni lo reconozco. Afortunadamente, no es el caso de La Orden de las Bestias. Bruce Wayne es él mismo, manteniendo incluso su origen norteamericano. Es más, tiene a Alfred de ayudante, y el traje con el que se estrenó precisamente en 1939. No creo que hubiera habido problema en darle un origen noble, de la aristocracia británica, pero han preferido respetar los cánones.
Lo que acontece en este tomito es una clásica historia que bien pudiera haber protagonizado Sherlock Holmes, al que también se hace referencia. El Batman detective que tan poco aparece en las actuales series regulares cobra aquí todo su sentido y protagonismo. A pesar de que sólo lleva un año en acción, la fama de Batman ha saltado el charco y no tiene problema alguno en colaborar con Scotland Yard para resolver el caso. Dado que estamos ante una historia breve, entrar en más complicaciones respecto a su figura no tendría sentido.
Batman es un novato y se nota en sus dudas y cavilaciones, y en su afán de ir aprendiendo de sus errores. También tiene su dosis de vida social como Bruce Wayne, con la inevitable dama encantadora. También el enfrentamiento a la problemática de la época, es decir, el ascenso del poder nazi.
Los diálogos son bastante densos, pero se leen con agrado. La historia avanza a buen ritmo dejando las pistas justas para que vayamos sacando nuestras propias conclusiones... y nos vayamos equivocando, como mandan los cánones.
Me ha llamado poderosamente la atención las similitudes entre esta sociedad secreta con integrantes poderosos disfrazados con cabeza de animales y canción infantil de por medio, con la celebérrima Orden de los Búhos de Los Nuevos 52. Seguramente, esta obra de 2004 sirvió de inspiración a la misma.
En cuanto al dibujo, es la primera vez que Campbell se atreve con el color, y se nota. Muchas viñetas están en blanco y negro, y los tonos de color que utiliza son monocromáticos, de estilo pictórico. En un arte bonito y adecuado para una historia ambientada en 1939, pero posiblemente no es un estilo que guste a demasiados aficionados del Caballero Oscuro. El retrato del Londres de la época es una delicia, y pararse a detallar cómo era la vida en esos momentos, como por ejemplo una llamada telefónica, es algo que se agradece.
En definitiva, una bonita historia que se lee con agrado y se sale de lo habitual. Si os gustan los Elseworlds sin duda debéis echarle un vistazo. Si no os atraen especialmente, tiene la suficiente calidad y respeto por el personaje de Batman como para que os interese.
BATMAN ENFRENTÁNDOSE A UN PODEROSO MIEMBRO DE LA ORDEN DE LAS BESTIAS |
Batman es un novato y se nota en sus dudas y cavilaciones, y en su afán de ir aprendiendo de sus errores. También tiene su dosis de vida social como Bruce Wayne, con la inevitable dama encantadora. También el enfrentamiento a la problemática de la época, es decir, el ascenso del poder nazi.
Los diálogos son bastante densos, pero se leen con agrado. La historia avanza a buen ritmo dejando las pistas justas para que vayamos sacando nuestras propias conclusiones... y nos vayamos equivocando, como mandan los cánones.
Me ha llamado poderosamente la atención las similitudes entre esta sociedad secreta con integrantes poderosos disfrazados con cabeza de animales y canción infantil de por medio, con la celebérrima Orden de los Búhos de Los Nuevos 52. Seguramente, esta obra de 2004 sirvió de inspiración a la misma.
EL CONATO DE ROMANCE NO PUEDE FALTAR EN UNA AVENTURA DE BATMAN |
En cuanto al dibujo, es la primera vez que Campbell se atreve con el color, y se nota. Muchas viñetas están en blanco y negro, y los tonos de color que utiliza son monocromáticos, de estilo pictórico. En un arte bonito y adecuado para una historia ambientada en 1939, pero posiblemente no es un estilo que guste a demasiados aficionados del Caballero Oscuro. El retrato del Londres de la época es una delicia, y pararse a detallar cómo era la vida en esos momentos, como por ejemplo una llamada telefónica, es algo que se agradece.
En definitiva, una bonita historia que se lee con agrado y se sale de lo habitual. Si os gustan los Elseworlds sin duda debéis echarle un vistazo. Si no os atraen especialmente, tiene la suficiente calidad y respeto por el personaje de Batman como para que os interese.
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