En este año 2014, que a nivel de estrenos de series está dejando mucho que desear, al menos en esta primera mitad de año, tenemos que refugiarnos en algunos estrenos de 2013. Es el caso de Vikingos, que en su segunda temporada ha demostrado que ha conseguido subir el listón de la primera. Sin caer en revelar nada de la trama, ya que con 19 episodios que llevamos estáis a tiempo de poneros al día los que no la hayáis descubierto, empezamos a desvelar 5 de las muchísimas razones por las que es una de las mejores series en emisión.
EL RITMO DE LA SERIE: Si hay algo no se le puede reprochar a Vikingos es el ritmo de las tramas. En un mismo capítulo todo puede dar la vuelta: una victoria, una derrota, un acuerdo, una traición... Olvídate de que puedes recoger la mesa viendo esta serie: si te pierdes una frase, una escena, o un gesto, es posible que más adelante no entiendas mucho de lo que pasa. No digamos ya perderse un capítulo. Todo esto sin necesidad de meter ningún tipo de paja y sin miedo a avanzar: tienen mucho que contar y lo saben. Series simplonas y mascaditas ya hay demasiadas ¿no?
LA RELACIÓN ENTRE RAGNAR Y SU HERMANO ROLLO ES DE LO MÁS VARIABLE A LO LARGO DE LA SERIE |
EL SENTIDO DE LA HISTORIA: Michael Hirst (Los Tudor), el único escritor de la serie, un apasionado de la historia, cuenta emocionado cómo le felicitó por ésta el jefe de estudios escandinavos de Harvard, ya que era la primera vez que esa cultura se tomaba en serio. Aquí nadie rescata a nadie a última hora, vemos sacrificios religiosos impactantes, ejecuciones impensables con rituales propios de la época, enfermedades que diezman a la población en un momento, la dureza de las heridas en aquella época...Todos los detalles están especialmente cuidados para ajustarse, dentro de lo posible, a la realidad. No seríais los primeros en abrir un libro de historia tras ver una serie de Hirst.
EL PODER DE RAGNAR DESPIERTA MUCHAS ENVIDIAS EN OTROS REYES |
LAS BATALLAS: El presupuesto de Vikingos no es escaso, unos 40 millones de dólares la primera temporada, pero parece multiplicarse en pantalla. Son incontables las batallas que vemos, algo totalmente inherente al pueblo vikingo. El realismo y crudeza de éstas, perfectamente rodadas, ponen en evidencia la carencia de éstas en otras series que también debieran mostrarlas más a menudo (si, me refiero a Juego de Tronos). También nos recuerda que, a pesar de que parezca lo contrario, cualquier tiempo pasado fue peor.
BATALLAR Y CONQUISTAR ES LO HABITUAL PARA LOS VIKINGOS |
UNA SERIE CORAL DONDE NO SOBRA NADIE: Te llegas a olvidar que el protagonista es Ragnar, ya que cualquier otro que aparezca en pantalla te absorbe tanto o más. Da igual si es su complicado hermano Rollo o los reyes con los que batalla o negocia. Destacaría al rey Ecbert, una rara avis, como Ragnar, emocionado con la cultura y el conocimiento que debe esconder su pasión, mientras oímos a otro rey decir que la lectura es para los monjes, un desprecio que abundaba entonces... y ahora. Otro personaje que os resultará imprescindible es Athelstan, el monje que se une a la filosofía vikinga y que está ahí para que, como espectadores, nos pongamos en su lugar.
EL REY ECBERT NO NECESITA SER UN VIKINGO PARA QUE QUERÁIS VERLO MÁS Y MÁS EN PANTALLA |
LOS PERSONAJES FEMENINOS: Los vikingos eran bastante avanzados respecto a las mujeres comparados con otras culturas: tenían los mismos derechos que los hombres en amplias poblaciones. Esta serie toma en cuenta eso y nos muestra a Lagertha, toda una guerrera que no por ello se dedica a imitar a los hombres en su comportamiento. No es la única que destaca, ya que otras como Siggy también aportan mucho a la historia utilizando su cabeza. Es de agradecer la complejidad que tienen estos personajes, ya que en otras series sólo se dedican a estar en peligro o buscar marido.
LAGERTHA, UNO DE LOS MEJORES PERSONAJES DE LA SERIE |
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