THE WALKING DEAD, EPISODIO 4X08 "TOO FAR GONE". LA CRITICA

Por fin ha llegado el fin de la mid-season que todos estábamos esperando. Tras dos capítulos en los que El Gobernador ha sido el protagonista absoluto, y en los que se nos mostraba su lado mas humano, en este episodio final de mitad de temporada nos damos cuenta que todo fue una ilusión, y que en realidad nada había cambiado dentro de la cabeza de Philip Blake, o Brian, o como quiera que se haga llamar este sádico loco. A partir de aquí, spoilers.

Todos sabíamos que tras la calma había de llegar la tempestad, y así ha ocurrido. Durante dos capítulos hemos asistido a una especie de renacimiento del personaje del Gobernador (David Morrissey), un tipo que ha pasado de casi dejarse morir a encontrar a unas personas por las que merecía la pena morir... y matar. El episodio comienza con Brian, El Gobernador, explicando a su nuevo grupo la necesidad de hacerse con la prisión, el único sitio donde pueden estar seguros. El Gobernador les cuenta su verdad, es decir, que algunas de las personas que viven allí ahora son asesinos, culpables de haberle mutilado, matado a su hija y destruido su anterior campamento. Obviamente, el grupo le cree, y mas cuando la situación en su precario campamento va cada vez peor.

EL GRUPO ACEPTA EL PLAN DEL GOBERNADOR SIN RECHISTAR

Mientras habla con el grupo, vemos mediante flashbacks como El Gobernador coge desprevenidos a Hershel (Scott Wilson) y Michonne (Danai Gurira), atrapándolos y convirtiéndolos en rehenes que les han de servir en la negociación con Rick (Andrew Lincoln). Hershel, prudente como siempre, intenta mediar con El Gobernador antes de que este lance el ataque. El viejo granjero parece ver el cambio sufrido por El Gobernador e intenta que este reconsidere sus planes de asaltar la prisión. Michonne lo tiene mas claro: ella solo quiere matarlo.

En la prisión, los enfermos de la epidemia se recuperan poco a poco, como Glenn (Steven Yeun) y Sasha (Sonequa Martin-Green), pero no tendrán tiempo para disfrutar de su recuperada salud, ya que los hombres del Gobernador se hallan a las puertas de la prisión, incluyendo el famoso tanque de los cómics. Estamos ante el ataque a la prisión que se nos escamoteó al final de la temporada anterior y que tan decepcionado dejó a los fans de la serie. El Gobernador hace uso de sus rehenes para presionar a Rick. Es curiosos como al ser reclamado por El Gobernador, Rick decline su responsabilidad en el consejo de la prisión, alegando que el ya no es quien toma las decisiones. Es una situación límite y Rick debería haberla afrontado sin titubeos. Finalmente, y viendo que las vidas de sus amigos están en manos del Gobernador, accede a parlamentar.

LAS COSAS NO PINTAN BIEN PARA HERSHEL Y MICHONNE

Y aquí viene para lo que nos han estado preparando durante los siete episodios anteriores. Por un lado tenemos a Hershel, un personaje que aportaba ya poco a la serie. Lo habíamos visto en anteriores episodios ofrecerse temerariamente a cuidar de los enfermos de la virulenta epidemia y dar lo mejor de si a costa de su vida. Obviamente, los guionistas de la serie nos estaban preparando para lo que habría de llegar en este capítulo, su muerte a manos del Gobernador. Este, enfurecido por la resistencia de Rick a abandonar la prisión, hiere gravemente a Hershel en el cuello con la catana de Michonne. En ese momento, se desencadena el infierno.

Todo lo que El Gobernador nos había hecho creer acerca de su nueva familia y su cambio de personalidad era falso. Sigue siendo el mismo tipo despiadado y sediento de venganza que al final de la temporada anterior, y no duda ni en decapitar a Hershel ni entrar a sangre y fuego en el recinto de la prisión con el tanque, aun a sabiendas que el ruido de la lucha atraerá a los caminantes, los cuales camparán a sus anchas ahora que las vallas han sido destruidas. 

- "¡MATADLOS A TODOS!"

El grupo de Rick se defiende como puede. Mientras una parte del grupo, los mas débiles, corren hacia la parte trasera de la prisión, donde les espera el autobús, el resto se emplea a fondo con los hombres el Gobernador. La escena del ataque a la prisión es de las mas espectaculares y emocionantes de la temporada y, por qué no decirlo, de toda la serie. Era lo que los fans esperábamos y Scott Gimple, el showrunner de la serie, nos lo ha ofrecido. 

Finalmente, incluso con los caminantes ya invadiendo el patio de la prisión, el grupo de Rick logra contener a los hombres del Gobernador, matándolos a casi todos. Especialmente impactante es la escena en la que una de las atacantes es abatida de un tiro en la frente por una de las niñas que Carol (Melissa McBride) tenía a su cargo. Parece que finalmente la niña aprendió bien las lecciones de Carol sobre autodefensa. El grupo de Rick se divide. Mientras Tyreese (Chad Coleman) y las niñas escapan por un lado, el autobús se marcha con la gente de Woodbury y Glenn. Daryl (Norman Reedus) y Beth (Emily Kinney) corren hacia no se sabe muy bien donde, mientras que Rick y su hijo escapan hacia el bosque; Sasha, Bob (Lawrence Gillard) y Maggie (Lauren Cohan) buscan desesperadamente a Beth. Y Judith, ¿donde está la pequeña de Rick? Una sillita de bebé ensangrentada nos hace temer lo peor.

LAS PUPILAS DE CAROL APRENDIERON BIEN COMO DEFENDERSE

Una de las dudas que tengo sobre este final es por qué el grupo abandona la prisión tan deprisa. En una de las escenas vemos como Daryl destruye el tanque y mata al personaje que interpreta Kirk Acevedo (Fringe). La lucha parece haberse resuelto a favor del grupo de Rick, a pesar de la pérdida de Hershel y de varios de los habitantes de Woodbury. Si, los caminantes han entrado en el patio de la prisión, pero no en el interior. Lo mas sensato hubiera sido intentar eliminar a los zombies, atrincherarse en el interior del edificio y esperar a una oportunidad para repara las vallas destruidas por el tanque. ¿Por qué abandonan la prisión tan rápidamente? ¿Creen que ya está perdida irremediablemente? Posiblemente, de ahí la desbandada. El resultado de todo esto es que tendremos un cambio de escenario en los siguientes ocho capítulos, lo cual siempre es algo bueno.

Pero, ¿qué le ha sucedido al Gobernador? Mientras entra con sus hombres en el recinto, Rick, agazapado tras un camión, atrapa al Gobernador enzarzándose ambos en una pelea en la que parece que el primero lleva todas las de perder. Cuando parece que El Gobernador va a estrangular a Rick, la espada de Michonne atraviesa su pecho, dejándolo malherido. Increíblemente, Michonne no lo remata, sino que lo deja a merced de los zombies, algo peor que matarlo. La verdad es que El Gobernador tuvo oportunidad de redimirse y la dejó pasar. Condujo al nuevo grupo a masacrar a otras personas y, en última instancia, a morir solo por satisfacer sus ansias de venganza. Engañó a todos con sus falsas promesas, eliminando a aquellos que podrían haberlo obstaculizado, como Martínez. También falló a su nueva familia, involucrándola en su vendetta personal. La madre de Meghan (Meyrick Murphy), muerta por un caminante, es la encargada de rematar de un disparo al Gobernador. 

SE ACABÓ EL GOBERNADOR... ¿O NO?

Pero, ¿ha muerto El Gobernador? Yo no lo tengo tan claro. En primer lugar no lo vemos morir, solo vemos a Lilly (Audrey Marie Anderson) apuntarle y oír el disparo, pero en ningún momento se nos muestra el resultado de ese disparo. ¿Es posible que ese disparo provenga de otra arma, de alguien que dispara a Lilly y salva al Gobernador, malherido pero aun vivo? No quedaría muy bien que los responsables de la serie decidieran darle otra oportunidad a este personaje, el cual, creo yo, ya ha cumplido su misión. ¿Qué explicación nos van a dar? ¿Que El Gobernador pasó unos meses en Tahití recuperándose a base de masajes, cócteles mai tais y leyendo novelas del detective Travis McGee? Lo descubriremos dentro de dos meses.

En definitiva, un episodio de alta tensión, tal y como se nos prometía en las promos, y que parece haber reconciliado a los fans con los responsables del show, tras el decepcionante y descafeinado final de la temporada anterior. Si a ello sumamos las impactantes muertes a las que asistimos en este capítulo, puede decirse que hay pocos motivos para quejarse, a menos que seas muy tiquismiquis, claro está.

PREGUNTAS SIN RESPUESTA

• ¿Por qué era tan obvio que la pequeña Meghan iba a morir a manos de un caminante? ¿Cómo dejó su madre que jugara tan lejos de ella?
• ¿Cómo es posible que Michonne pueda escapar en medio de esa lluvia de balas sin que ninguno de los hombres del Gobernador intente dispararle?
• ¿Quien de dentro de la prisión se entretenía diseccionando ratas y, presumiblemente, alimentando con ellas a los caminantes?
• ¿Es esta rata muerta la usada por el infiltrado para infectar a los de la prisión con el virus? Puede que los guionistas de la serie hayan visto Los Señores del Acero, de Paul Verhoeven, donde Leonardo DaVinci usa un método parecido para eliminar las gentes de un castillo asediado.
• ¿Está El Gobernador realmente muerto? Puede que si, a la vista de esa pieza de ajedrez con parche en el ojo aplastada por el pie de un caminante.
• ¿Ha muerto Judith? Su sillita ensangrentada, ¿es lo que parece?
• Tengamos en cuenta que a Rick no le da tiempo de decirle a Tyreese lo de Carol antes del ataque. ¿Se encontrará Tyreese y las niñas con Carol en su huida de la prisión?