THE MILLERS, EPISODIO 1X01. LA CRITICA

Esta comedia dirigida por James Burrows (Cheers) ha sido la gran triunfadora de las nuevas comedias estrenadas en esta temporada de otoño 2013. Ya ha sido renovada y apenas bajó la audiencia que tuvo su piloto (13 millones de espectadores) en el segundo capítulo. ¿De qué va Los Millers? Nathan (Will Arnett), un periodista local, decide divorciarse de su esposa, a la que considera una gran controladora. Cuando se entera Tom, su padre (Beau Bridges), decide hacer lo mismo y tirar por la borda 43 años de matrimonio con Carol (Margo Martindale). Lo curioso es que en vez de buscarse cada uno su propia casa, la madre se va a vivir con su hijo, y el padre, con su hija, Debbie (Jayma Mays), su esposo Adam (Nelson Frankling) y nieta.

ACTORES QUE OS SONARÁN A TODOS PROTAGONIZAN LA SERIE

La serie, dentro de que repite el esquema familiar que hemos visto tantas veces, lo que es divertir, divierte, que ya es mucho. Los diálogos son algo pomposos, y las situaciones algo forzadas buscando la risa, como el baile Dirty Dancing entre madre e hijo. También es un poco raro que un hijo soltero consienta que su madre se mude con el, pero parece que la convivencia entre ellos va a ser uno de los pilares de las situaciones cómicas, así como la del padre con la hija, su marido y su nieta. Se agradece que no estemos ante los triunfadores natos con supercasas y supertrabajos, que pareciera a veces el único modelo familiar norteamericano. Aquí el negocio del marido de Debbie va de pena y, aunque Nathan no se puede quejar, no deja de ser el típico periodista de anécdotas absurdas que llenan los telediarios con chorradas en vez de con noticias relevantes. Se agradece que se dejen de elitismos en estos tiempos en que lo mas común es pasarlas canutas para llegar a fin de mes.

ESTA ESCENA COMO QUE NO ME LA CREO EN LA FIESTA DE UN SOLTERO

La esencia de la serie, que ya en el piloto pone las bases, son la torpeza del padre para hacer nada sin su esposa, que por otro lado es una controladora nata, y cómo los hijos tienen que ayudar a sus padres en sus nuevas vidas. Todos sufrirán las consecuencias de un cambio de vida para el que ninguno de los dos está preparado.

No es justo decir que a la serie le ha ido bien sólo porque se emita después de The Big Bang Theory arrastrando así mucha audiencia con la inercia, pero sin duda es un factor que ayuda y mucho. Si queréis echar unas risas sin necesidad de que os reinventen el género, basándonos en los padres desastres que complican la vida a los hijos, creo que podéis verla y que cumplirá con su función. Entreteneros unos 20 minutos sin mayores problemas. Si buscáis algo nuevo, no lo encontraréis aquí.

The Millers

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