Como es habitual en la serie American Horror Story, la temporada comienza renovando completamente la temática pero no los actores. En este caso, la referencia serán las brujas del siglo XIX, pero la ambientación será en el presente. No falta por supuesto el personaje histórico que destacó por su crueldad infinita. En este caso, Delphine LaLaurie (Cathy Bates) famosa de la alta sociedad por torturar a sus esclavos por diversión en lo alto de su casa. Como siempre, Falchuck y Murphy saben de sobra que no hay nada tan terrorífico como la realidad.
La serie comienza en 1834, en la ciudad de Nueva Orleans, donde Delphine ya no es la belleza de antaño y está deseando casar bien a sus hijas. Pronto descubrimos que se dedica a torturar de manera espeluznante y por largo tiempo a muchos esclavos. Sin embargo, estas escenas no son de las más impactantes que nos ha ofrecido la serie, ya que Cathy Bates no acaba de impresionar como la psicópata que es. Es cierto que su doble vida era secreta, pero en los momentos de tortura no nos eriza la piel como debería. Veremos más adelante si lo consigue o tiene otro fin en la serie.
DELPHINE LALAURIE, UNA RETORCIDA PIJA DE LA ÉPOCA |
Ya en la actualidad, Falchuck y Murphy nos muestran sin pudor una bruja, Zoe (Taissa Farminga) que más que bruja parece la mutante Pícara. Su forma de saber sus poderes es la misma que en la película de los X-Men (aunque en vez de tocar, necesita mantener relaciones para matar a otra persona). Por si esto fuera poca referencia, es mandada a la escuela de Jóvenes Talentos Para Señoritas, regentada por una comedida Cordelia (Sarah Paulson) que quiere enseñar a las chicas a controlar sus habilidades y protegerlas de un mundo que sigue echándolas a la hoguera. Si Cordelia es el profesor Xavier, no falta por supuesto el papel de Magneto, encarnado en Fiona (Jessica Lange), la bruja suprema deseosa de que las chicas salgan a la luz y que está dominada por sus ansias de volver a la juventud.
-A VER COMO HAGO CARRERA DE VOSOTRAS |
El grupo de brujitas de la escuela es de momento bastante flojito. Son demasiado pocas, a no ser que luego lleguen más. Las que tenemos ahora carecen de interés y parecen tener nula química entre ellas. Zoe parece la típica buena chica, pero que no tiene problemas en castigar a quien lo merece. Madison (Emma Roberts) es la típica adolescente guapa desagradable y egocéntrica que oh! sorpresa, sufre mucho en el fondo. Si la han puesto en plan parodia, no acaba de funcionar. Y si es en serio, tampoco. Queenie (Gabourey Sidibe) y Nan (Jamie Brewer) completan el heterogéneo grupo. La primera es enemiga acérrima de Madison, pero de momento las luchas no están conseguidas. Ni divierten ni te las crees, demasiado forzadas. Nan es la más conciliadora y la que menos problemas parece que va a dar. Suponemos que mas adelante luzca más este grupo, porque es clave para que nos enganche de nuevo la serie tanto como en las dos temporadas anteriores.
ANGELA BASSET, BELLÍSIMA, HACE UNA IMPACTANTE APARICIÓN |
Veremos si nos perfilan mejor al pequeño grupo de brujitas mutantes en ese inmenso caserón (lo siento, pero ya no puede uno evitar pensar en la factura de la luz y en la limpieza de semejante palacio para 4 brujas que caben en un pisito de protección oficial). Seguro que las compañías eléctricas están a prueba de hechizos y pasan sus abultadas facturas. A parte de eso, el episodio convence perfectamente, no falta el ritmo de las tramas y el avance de la historia.
Técnicamente, como ya nos tienen acostumbrados, sigue siendo impecable y prestando una gran atención a los pequeños detalles. El look es completamente diferente a los vistos anteriormente. Mucho colorido, tomas originales y bellas, grandes espacios frente a los pequeños que utilizaban antes...
JESSICA LANGE SIGUE SIN TENER UN PAPEL DE BUENA...YA SE SABE QUE SON ABURRIDOS |
Así que, aunque no nos hayamos rendido completamente a esta nuevo comienzo, sobre todo por el grupo de brujitas, no hay razón alguna para no embarcarse de nuevo en la propuesta de Falchuk y Murphy. Sería raro que no nos atrapen de verdad en los próximos episodios, ya que hay suficientes incógnitas en este primer capítulo, incluyendo un estupendo final que nos deja expectantes ante el próximo.
En cuanto a audiencias, la cosa no ha podido ir mejor, más de 5 millones de espectadores, que bate el record de la serie y casi de la cadena FX. Estupendo, viendo como la segunda temporada bajó respecto a la primera, aunque su calidad fue posiblemente superior. Parece que hay más gente dispuesta a saber de brujas que de enfermos mentales. Lógico por otra parte. Les deseamos lo mejor en esta nueva aventura.
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