SPARTACUS: VENGANZA, EPISODIO 2X07 "SACRAMENTUM". LA CRÍTICA

Spartacus y su grupo de rebeldes continúan liberando esclavos para servir a su causa contra Roma, esta vez unos germanos que iban a ser vendidos en el puerto. Es Agron quien decide liberar a sus compatriotas en vez de otros esclavos, lo que traerá muchos problemas disciplinarios a Spartacus. Una vez más vemos como el tracio tiene que lidiar con
los distintos objetivos vitales y diversas maneras de pensar de los que pretende ganar para su causa, casi siempre con las armas que da el razonamiento, aunque con estos germanos tenga que adoptar alguna medida algo más violenta.

 A VECES HAY QUE PARTIRLE LA CARA A ALGUIEN PARA QUE SE CALME

La rivalidad entre Crixus y Agron se acentúa en este episodio debido a la llegada de los germanos al campamento de Spartacus. Hay que señalar que el tema de la hostilidad entre ambos gladiadores ya se está haciendo un poco pesada, demasiado maniquea incluso, pues Crixus ya debería tener claro que Agron se redimió ante él por su mentira sobre Naevia. 

Tras abandonar el campamento de Spartacus, Gannicus vuelve a Capua en busca de monedas con las que emborracharse y contratar los servicios de alguna prostituta, lo que ofrece la excusa perfecta para tener nuestra ración semanal de cuerpos desnudos fornicando por doquier, lo cual no está mal por cierto. Sin embargo lo que halla no es otra cosa que verse envuelto en los planes de Claudio Glabro y Ashur. Especialmente perturbadora es la escena de la crucifixión de la amiga prostituta de Gannicus, por el mero hecho de haber pronunciado el nombre del líder tracio. 

ALGO SE MUEVE EN LA CONCIENCIA DE GANNICUS ANTE ESTA IMAGEN

El personaje que continúa dejándonos los mejores momentos de la temporada es el sirio Ashur, el cual sigue sometiendo a su antigua Dómina a las vejaciones que a el se le antojan. Lucrecia no tiene forma de quitarse de encima a Ashur (en todos los sentidos) pues este se ha convertido en mano derecha del legado. La viuda de Batiato intentará engañar al marido de Ilitia para que ambas sean enviadas a Roma, haciéndole creer que el embarazo de esta corre peligro. Sin embargo, esta treta no da resultado y Lucrecia recurre a Gannicus para que elimine al sirio de la ecuación.

VIVA BIANCA ESTÁ INTERPRETANDO UNA DE LAS MEJORES
VILLANAS DE LA TELEVISIÓN ACTUAL

El personaje de Seppia, el cual no ha tenido gran relevancia para la trama hasta ahora, toma un poco de protagonismo por su indisimulada atracción por Glabro. El legado tampoco hace nada por ocultar sus deseos por la que fuera la hermana de Seppius, asesinado por los hombres de Ashur para así quedarse con el mando de sus soldados. Es divertido ver la cara de Ilitia, mezcla de incredulidad e indignación, al ver los coqueteos que su marido y la joven Seppia se traen entre manos a la vista de todos.

Este séptimo episodio, a pesar de no haber sido demasiado espectacular, nos ha dejado algunas escenas de lo más impactantes, como la muerte del gigante germano por la espada de Spartacus, de lo más gore visto en la serie, o la crucifixión de la prostituta. El cliffhanger del final quizás sea otro de esos momentos espectaculares, con Ilitia raptada por un Gannicus que parece haberse replanteado sus simpatías por la causa del rebelde tracio.