ARRUGAS O EL CÓMIC POLÍTICAMENTE CORRECTO

  No soy muy aficionado al tipo de cómic en el cual podría encuadrarse una obra como Arrugas, del dibujante valenciano Paco Roca, pero creo que merece una entrada en el blog. Este cómic fue galardonado en el Salón del Cómic de Barcelona de 2007 al mejor guión y a la mejor historieta española. Al año siguiente ganaría el Premio Nacional del Cómic.

  He echado un vistazo a la obra anterior de este dibujante y me he dado cuenta como su estilo y las temáticas que aborda han ido evolucionando gracias, creo, a su labor de ilustrador gráfico que hace que domine diversos estilos. En sus primeros trabajos para revistas como El Víbora o Kiss Cómics, Roca realiza encargos puramente alimenticios pero en los que sobresale su maestría gráfica. A comienzos de esta década publica el álbum GOG;luego El Juego Lúgubre, editado en varios países europeos. También hace una incursión en el cómics de aventuras con Alexandre Icaro.En 2004 publica El Faro, y en 2007 le llega el éxito con Arrugas.



Portada de la revista Gigamesh,por Paco Roca



  No nos engañemos:Arrugas es un cómic dirigido a lectores no habituales de cómic. Su estilo visual es sencillo, casi esquemático, en contraste con otras obras del autor, mucho más elaboradas. El éxito del cómic es la problemática social que aborda, pues su realización gráfica realmente no aporta nada. Este tipo de novelas gráficas, que se venden tan bien en las grandes superficies, cumplen unos patrones tanto de guión como de estilo visual bastante reconocibles.

  En primer lugar, todo cómic de temática social que se precie debe tratar sobre temas que toquen la fibra sensible a la inmensa mayoría de posibles lectores: enfermedades, vejez, maltrato infantil, violencia de género, igualdad, exclusión social...Me atrevería a decir que muchas de estas obras parecen folletos o trípticos editados por la administración pública para informar de la adicción o enfermedad de turno. Si eres un autor novel y quieres triunfar aquí en España es el primer requisito que debes cumplir en tus obras. Estas temáticas, mal llevadas caen fácilmente en la sensiblería y la lágrima fácil, más que en la reflexión y la ironía.

  El segundo requisito sería plasmar en imágenes de estilo sencillo lo que se nos quiere contar con el guión. Pocos cómics de trasfondo social he visto con un estilo gráfico potente, colorista y original. La mayoría de autores poco o nada se preocupan del color, casi siempre blanco y negro o tonos grises.Predomina la línea clara, siguiendo las pautas de la bande dessinée europea, pero sin grandes alardes ni en realismo ni detallismo, no vaya a ser que sean confundidos con cómics de superhéroes. Para un enamorado de la ilustración como yo, el ver el tipo de dibujo de muchas de estas "obras" me produce un inmediato rechazo.

  Una tercera condición para triunfar en esto de las novelas gráficas "sociales" es ser políticamente correcto, cuanto más mejor. El recurrir al "noveno arte" para plasmar las reivindicaciones y problemáticas de esta sociedad en la que vivimos es algo que está de moda. Cada vez son más los concursos de cómics que se celebran por toda la geografía nacional en los que se incluyen apartados para obras de contenido social.

  En el XVI Concurso Nacional de Cómics "Ciudad de Dos Hermanas", localidad en la que resido, las cuatro opciones temáticas eran:

* Tema libre.

* Manga de tema libre.

* Educación afectivo-sexual: homosexualidad, SIDA, embarazos no deseados, placer...

* Prevención de adicciones,tales como drogas, alcohol, juego, etc.

Esto es sólo una muestra de lo que nos encontraremos en todo certamen sobre cómics que se precie de ser progre y políticamente correcto. Harto dificil sería ver en el palmarés de cualquiera de estos certámenes nombres como Robert Crumb, Manara o Gilbert Shelton.

  Paco Roca,después de ser premiado por su cómic sobre el alzheimer ha publicado El invierno del dibujante, recreación más o menos novelada de la génesis de la mítica revista de tebeos Tío Vivo.Todo apunta que esta nueva obra tendrá grandes opciones de llevarse de nuevo otro premio importante.

  No le quito mérito a la obra de Paco Roca, como tampoco debería quitársela a otras obras del mismo tono, pero creo que se está monopolizando el panorama de la novela gráfica adulta con estas temáticas tan afines a las corrientes políticas y sociales que nos sacuden. Desgraciadamente, desde el declive de las revistas de cómics españolas de los años ochenta (1984, Cairo, Cimoc, Zona84, Creepy, Totem y muchas otras) muchos escritores y artistas españoles dejaron de crear cómics o simplemente se reciclaron, abandonando por el camino temas y estilos infinitamente más interesantes que los tratados actualmente en los cómics nacionales.Mirar las estanterías dedicadas al cómic patrio actualmente es añorar lo pasado, al menos ese es mi caso.