Esta serie de 2012 y que se estrena en estos días en una plataforma de pago en España, nos cuenta una realidad que muchos aseguran que viviremos en el futuro. Se trata de la existencia de Hubots, es decir, robots con aspecto humanoide que realizan las tareas de asistencia que hasta ahora realizaban otras personas... y algunas cosas más. ¿Es una visión inteligente del avance de la inteligencia artificial y sus consecuencias o no saben ofrecer nada nuevo?
La mejor definición que se me ocurre para el primer capítulo de Real Humans es grata sorpresa. La serie es sueca, pero su ritmo y narrativa no tiene nada que envidiar a cualquier serie de calidad norteamericana. Si sois de los que recelan del ritmo pausado de muchas producciones nórdicas, no tenéis nada que temer de Real Humans. Tampoco de la excesiva frialdad de la que, en mi opinión, pecan otras de impecable factura como 1864 (podéis leer nuestra crítica aquí). Si no fuera por la excesiva cantidad de personajes rubios, pasaría por una serie norteamericana en lo que a buen hacer se refiere.
En este primer capítulo se nos plantean algunos problemas de la lucha entre Hubots y humanos que no están demasiado claros todavía. Sin embargo, si que profundizan bastante en cómo incorporar a una familia un androide dispuesto a cumplir todos nuestros deseos, toda una bomba de relojería. Además, se ofrecen dos perspectivas interesantes: un hombre mayor cuidado por un robot al que le coge un gran afecto, y una asistenta casera de aspecto juvenil y atractivo que atiende tanto las labores domésticas como a los hijos... por no hablar de sus posibilidades sexuales. Y eso que no va mas allá de momento de los efectos emocionales, y no entra en lo que puede suponer de rechazo en una sociedad que los robots sean más eficientes, y por tanto más rentables, para las empresas, aunque ya se insinúa en este primer capítulo.
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| EL SUEÑO DE UN ROBOT PARA TODO PUEDE CONVERTIRSE EN PESADILLA |
La serie no pretende adoctrinar ni en un sentido ni en otro: sencillamente nos ilustra de una forma bastante plausible lo que sucedería si pudiéramos tener esclavos artificiales, y lo imposible que resulta competir con ellos como humanos imperfectos. Todo un acierto que nos hagan pensar y posicionarnos, entre los que opinan que poco importa cómo sea el destinatario de nuestro afecto si el sentimiento hacia él es sincero, y los que rechazan estos seres simplemente por ser algo artificial.
A pesar de no contar con la espectacularidad de otras producciones de ciencia ficción norteamericanas o británicas, Real Humans demuestra de nuevo que donde hay buenas ideas y ganas de hacer las cosas bien, los grandes presupuestos no son necesarios para disfrutar la historia. Ya queda por ver cómo evolucionan, hacia donde va el grupo rebelde de hubots y cual es su problemática.
Sin ser lo nunca visto, porque los peligros de la inteligencia artificial ya han sido advertidos una y mil veces en centenares de obras de ficción y por mas de un científico de prestigio, como Stephen Hawking, quizás sea esta la primera generación que realmente pueda conocer como será la vida artificial. Si no como la cuentan en la serie, casi. Así que eso incrementa el interés de una problemática que más que ficción, es un adelanto de un futuro no ya muy lejano. Y, si lo hacen de una manera tan efectiva y entretenida, mejor.
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