THE WALKING DEAD TEMPORADA 3: 10 COSAS QUE NOS HAN DECEPCIONADO DE LA SEGUNDA MID SEASON (SPOILERS)

No he podido evitar expresar lo decepcionante que me ha resultado la segunda mid season de la tercera temporada de The Walking Dead. Es cierto que ha tenido que superar dos lastres que han influido mucho en esta impresión. Por un lado, lo excelente que fue la primera parte. Ofrecía a partes iguales emoción, acción, buenas tramas y zombies. Convenció a critica y público por igual, algo muy, muy complicado. Tras esa excelente primera parte, los artífices de la serie nos avisaban que lo mejor estaba por llegar en la segunda tanda de episodios que se emitirían a partir de febrero, que sería como la gran y atronadora explosión final. No sé vosotros, pero ayer vi el último episodio y aún sigo esperando ese momento. He aquí mi lista de lo que ha fallado en esta segunda mid season. Aunque lo puedo resumir en sólo una: han echado a Glen Mazzara y no han coordinado bien la segunda parte, aunque ya estuviera rodada. 

• Han sustituido las emocionantes escenas de acción por lentos y mal llevados momentos intimistas y de diálogo. No es que esté mal, siempre y cuando lo hagas bien. Pero no ha sido el caso. Hay que ser un Weiner (el creador de Mad Men) para saber hacer ese tipo de cosas y Scott Glimple, el sustituto de Mazzara, no tiene ni idea, a su Motorista Fantasma me remito. Ni el episodio de Morgan ni el que enfrentaba a El Gobernador y a Rick tenían la profundidad ni la transcendencia que pretendían para dedicarles a ambos un episodio. Sólo nos aburrieron con reflexiones simplonas que no aportaban nada. Esta serie tiene que ofrecer sobre todo zombies, y no se nos pueden escamotear con la excusa de que son solo un pretexto para contarnos las relaciones humanas en momentos críticos. 

• Rick parece tener personalidad múltiple. Lo mismo deja tirado a un autoestopista que no significaba peligro alguno, a diferencia del chico que liquidó Carl, que colecciona viejecitas y gatitos abandonados sin tener ni para comer él ni su grupo. Por otro lado, tras su encuentro con el Gobernador, entiende como cualquiera a estas alturas, que los va a liquidar a la mínima hagan lo que hagan. Pero luego se olvida y pretende entregar a Michonne a una muerte segura como si fuera a servir de algo. Pero luego se le olvida otra vez y piensa que no, que está mal lo de dejar que torturen a alguien. ¿Pero decisiones de este tipo se pueden ir cambiando tan a la ligera? Habría que verlo eligiendo en un restaurante. Disparatado.

• Milton. En vez de aliarse con Andrea desde que vieron el percal, decide quemar un montón de zombies para intentar parar al Gobernador. Y luego vuelve a Woodbury, como para no levantar sospechas. Claro, era muy difícil de adivinar. Woodbury está formado por un bulto amorfo de gente que se mueve de fondo, El Gobernador y Milton. ¿Cómo se habrá dado cuenta de la traición de este último? Debe ser un genio este Gobernador. 

• Andrea. Como suelen hacer en esta serie, intentan que el que van a liquidar nos caiga mal para que nos enfademos menos. Por eso lían a Andrea con El Gobernador dejando tirada a Michonne. Aunque ciertamente, yo entendía que buscara cobijo y algo de normalidad tras tanta hecatombe. Y no creo que se haya portado mal, aunque para muchos fans parece que sí. Pero el final ha querido ser tan rebuscado e impactante, que no hay por donde cogerlo. ¿Por qué Milton y ella no planean algo sabiendo que se van a quedar solos? ¿A qué tanta charla mientras Milton agoniza a punto de convertirse en zombie? ¿Por qué el no se arrastra y le acerca el dichoso alicate? Por lento que fuera, eran 4 metros. Ya debía saber Milton que desde que murió Penny, la hija del Gobernador, de nada le iba a servir a éste mas que de estorbo. Este si que se ha suicidado y no Andrea. 

• Merle, en vez de hablar con su hermano de cómo preparar una emboscada contra El Gobernador, se va sólo contra un montón de francotiradores. La cosa era darle un final heroico y predeterminado, no importa lo absurdo que fuera que Rick se planteara entregar a Michonne. Este parámetro se repite bastante, una muerte rocambolesca a la que no sabemos cómo hemos llegado. 

• El ataque a la prisión. Una de los timos televisivos más evidentes de los últimos años. Un ejército armado hasta los dientes liderados por El Gobernador se presenta para invadir una cárcel ocupada por el pequeño grupo de Rick. Un bombazo, y derrumban la torre de la prisión. Una ráfaga de metralleta, y caen 50 zombies al momento. Pero no contaban con la estrategia de Rick. Una vez entran en la prisión, no hay nadie... ¡Qué susto!... Por si eso no fuera bastante tenían...¡muchos petardos! ¡Ohh que miedo, por no hablar de una frase de la biblia subrayada! ¿Qué pueden hacer contra eso las bombas? Para morir de terror. Normal que salieran en tropel asustados como colegialas en minifalda. Encima, dicen que no quieren la prisión porque no vale para nada. ¿Un sitio vallado para cultivar, almacenar, y realizar actividades de todo tipo resguardado no vale de nada? Esta bochornosa escena sólo tiene una cosa buena: dura poco porque si no íbamos a explotar de vergüenza ajena, tanto los que lo vimos como los que la rodaron. 

• El Gobernador. Hubiera sido mejor desarrollarlo de una forma más creíble. Me da igual que así sea el de los cómics. También veo a Batman volar en los cómics de edificio en edificio con el batarang y no deberían contarlo así en una serie. Son medios distintos con lenguajes distintos. El Gobernador termina siendo un sádico loco que se carga medio Woodbury porque sí. Encima, lo tienen a tiro y no le disparan. Es más, Allen se queda alelado esperando a que le dispare. ¿Por qué? Si yo mismo mataría a cualquiera que viera hacer algo así si tuviera oportunidad. Pues muy fácil: no se les ocurre un villano para la cuarta temporada, de ahí que lo hayan hecho personaje regular.

• ¿En qué se basa la fidelidad de Martínez y el compañero de color al Gobernador? No estamos hablando de un mafioso que te embadurna de dinero y vicios. Aquí no hay nada de eso. Ni siquiera tiene alimentos guardados con los que sobornar. Podrían haberlo liquidado y volver como unos héroes y arreglar las cosas con Rick. Por cierto, ¿dónde se meten tras la matanza? Porque Rick llega por la noche para asaltar Woodbury y aún no han llegado. ¿Se han quedado en el bosque a vivir las locas aventuras zombies del Gobernador y sus secuaces? Porque no hay mucho por ahí para entretenerse, y se supone que deben contar su versión de que los muertos son culpa de Rick. Pero lo mismo les ha dado por hacer senderismo, total, cualquier excusa es buena para que Rick llegue antes y se lleve a la gente como si fueran borregos sin voluntad ni opinión.

• Por cierto, ¿qué población queda en Woodbury tras la matanza del Gobernador y la fuga geriátrica hacia la prisión? Si eran sólo unos 70 al empezar, mas los que han ido cayendo de ataque en ataque, para mi que el censo a estas alturas se ha quedado en dos gallinitas sarnosas, y una vaca llamada Polly. Claro que esas son mis cuentas.

• Los zombies cada vez asustan menos. Los eliminan con una facilidad pasmosa y encima cada vez están más débiles y demacrados. Sentido tiene, no lo niego, pero a ver cómo llegan a la cuarta temporada a este paso, no se podrán ni tener en pie. Porque por mucho que la serie lleve muy bien el tema del apocalipsis, las relaciones humanas y el sacar lo mejor y lo peor en situaciones extremas de las personas, a ver quien sigue viendo la serie si ya no hubiera zombies. Imaginadlo un momento... ¿A que no cuela? 

Tanto cambio de showrunner no podía ser bueno y algo muy gordo debe haber detrás para que se hayan ido ya dos. De las muchas teorías que pululan por la red yo me creo, visto lo visto, que Mazzara quería avanzar, cargarse al Gobernador o a Rick (de ahí tanto cambio y tanta locura, para que nos caiga mal) y seguir adelante, y AMC ha preferido mantener la fórmula y repetir villano y escenarios para la cuarta temporada. Es que es de baratito...