BATMAN: ODISEA, DE NEAL ADAMS. LA CRITICA

Neal Adams vuelve tras muchos años para ofrecernos esta obra, encargándose tanto de la historia como del dibujo. A lo largo de los 13 números de los que consta el tomo, veremos aparecer a Batman, a Dick Grayson como un joven Robin, y villanos como El Acertijo, El Joker, El Pingüino, Ra´s Al Ghul y Talia. No solo eso, también Deadman, ManBat, Aquaman y alguna otra sorpresa que no debo desvelar. Pero no sólo eso, un viaje al centro de la Tierra hará que se unan al cómic dinosaurios voladores, gnomos, trolls y otros seres que se ocultan a la vida diaria de los que vivimos sobre la superfície.

LA DEPILACIÓN LASER NO VA CON BATMAN

Que Robin sea un adolescente e impulsivo Dick Grayson da idea de lo desfasado que está este cómic. A Neal Adams no le debe sonar no ya Tim Drake, sino Jason Todd. Neal Adams debió decir cuando le ofrecieron este trabajo que no estaba para estos trotes y que dibujar sí, pero guionizar no. Menudo disparate de cómic sin pies ni cabeza que me he tenido que tragar. Si no fuera porque había que reseñarlo, lo habría dejado antes de terminar el primer número. Unos giros propios de los años 70, diálogos que parecen sacados de la serie de televisión de los 60, un Batman que no para de charlar como si fuera Spider-Man...¿Habrá algo mas impropio del personaje que la cháchara?

PUES SI, ESTO ES TODAVÍA MAS IMPROPIO QUE EL NO PARAR DE HABLAR...

Que la historia recuerde a los 70 no es malo en sí, pues había buenas historias y se puede entender un homenaje a aquella época. Pero es que esto no es ni una historia, esto es una sucesión de despropósitos a cual más bizarro en la que todo está permitido menos la coherencia ni el interés. Los recursos utilizados son máscaras para simular ser otra persona, sangre de pega...y, a falta de un repelente de tiburones, una raya voladora asesina que aparece por obra y gracia de Aquaman sin venir a cuento, con una vestimenta más dolorosa que los aguijonazos de la raya.

¿Y ESTE A QUE VIENE, CON ESAS PINTAS?

Pero no fuera lo bastante mala y ridícula la primera parte, científico con hija raptada incluida, nos queda la segunda, todavía peor. Peor por la temática a lo Viaje al Centro de la Tierra, y porque estamos deseando terminar. Gracias a unos monos evolucionados que son la versión de Batman y Robin bajo la tierra, entramos en un mundo de fantasía donde nuestro héroe es admirado y venerado por todos los seres, ya que se le supone capaz de todo y es toda una estrella.

VERSIONES SUBTERRÁNEAS SIMIAS DE BATMAN Y ROBIN. SIN COMENTARIOS.

El dibujo sí tiene mucho talento, eso no se puede negar. Es muy anticuado, no ya por ese Bruce Wayne de pelo en pecho, sino por lo recargado que es todo, porque vemos las mismas poses que hicieron famoso a Adams en sus buenos tiempos... Y qué decir de los trajes, el de Talia parece sacado de Studio 54 en su apogeo. Pero eso no significa que no siga siendo un maestro como dibujante. Un traje de alta costura de los 60 puede ser una obra de arte aunque nadie lo lleve a los oscars hoy día. Adams no se ha reciclado, pero cuando has cambiado la historia del cómic te lo puedes permitir con toda tranquilidad. Si se hubiera renovado como dibujante, sería para desmayarse lo que sería este hombre capaz de hacer con un lápiz. Lo malo es que la historia es tan malísima que se cargaría un cómic dibujado por Leonardo Da Vinci.

EL VILLANO DE OTRA RAZA, LA DAMA MANIATADA...¿FALTA ALGUIEN EN EL ESCAPARATE?

No sé qué pretendía contar Adams con este bodrio. Parece que lleva algún mensaje: pone a prueba la decisión de Batman de no matar, plantea si los criminales lo son por el ambiente inadecuado...pero se ha quedado en la visión plana de buenos y malos, algo que cuando se superó, hizo avanzar enormemente el mundo de los superhéroes. En lugar de una trama con sentido, Adams saca a todos los villanos de los que se acuerda y encima, dinosaurios.

LO DE ODISEA SERÁ POR LO QUE CUESTA TERMINAR EL TOMO

De verdad, es para ojear el dibujo y alabar que Adams sigue dibujando de miedo, pero por favor, que no lo dejen escribir nada más. Ni la lista de la compra. Si lo hubiera dejado en 4 grapas, y hubiera quitado tanta morralla, y toda la parte del Centro de la Tierra, lo mismo se podía tolerar como curiosidad.

La conclusión es que hacía tiempo que no leía nada tan horrible, quizás Batman Incorporated, aunque por razones muy diferentes. Es una verdadera tortura que emborrona lo que Adams ha aportado al mundo del cómic en sus buenos tiempos. Qué pena, la verdad.