Esta novela gráfica, guionizada y dibujada por Lee Bermejo, pretende adaptar el famoso Cuento de Navidad de Dickens al mundo de Batman. Por supuesto, de una personalísima manera. Seguimos la trayectoria de un hombre llamado Bob, que se ve obligado por las circunstancias a trabajar para quien no quiere, y a hacer lo que no debe. Batman se cruza en su camino y lo trata de una manera dura, algo que vemos extiende a todos los que le rodean, Gordon, Alfred, Catwoman, y al héroe invitado, Superman. Quizás se de cuenta de que no puede seguir pretendiendo que no necesita a nadie y que la lucha contra el crimen sólo tiene un camino.
Cuando un dibujante se mete a guionista, lo normal es que no le vaya muy bien. Se me ocurre la excepción de Alan Davis, y poco mas. Afortunadamente, podemos añadir un nombre nuevo a la lista, Lee Bermejo. No es la primera vez que la historia del señor Scrooge se aplica a Batman, pero esta es diferente a lo ya visto. Vemos a un pobre hombre que debe ayudar al Joker obligado por los gastos que le suponen las medicinas de su hijo enfermo (vale, es manipulador, pero funciona). Batman es tremendamente duro y está obsesionado con erradicar el crimen, sin tener en cuenta los matices que en otras ocasiones pondera. La muerte de Jason Todd planea sobre él y eso le agrió el carácter, y más si se enfrenta a su asesino, El Joker.
UNA CATWOMAN IMPONENTE Y JUGUETONA |
Catwoman, sería la fantasma que le recuerda tiempos pasados felices, aunque aparece comportándose como una parodia de ella misma. La pobre no sale bien parada del encuentro con Batman, aunque él tampoco. Como el fantasma de las navidades presentes aparece Superman, que parece notar el cambio de su amigo. Y el que representa al fantasma que le enseña su terrible futuro si no cambia, pues es el Joker.
La historia es bonita, muy introspectiva, y aunque podría estar más pulida, ya que lo que hace El Joker con Batman no se entiende muy bien si no es por servir a la historia, es un gran comienzo para Lee Bermejo como guionista del murciélago. Seguro que si le dan más oportunidades, lo irá perfeccionando.
Se puede leer en un ratito, porque el texto no es muy extenso, o en horas y horas, si le dedicas a cada dibujo el tiempo que se merece. A primera vista, recuerda a Alex Ross, pero sólo a primera vista. La calidad de Bermejo es impactante desde la primera página, y se nota que se ha dejado la piel en esta obra. Su Catwoman es para deprimir de por vida a cualquier estudiante de Bellas Artes. Impresionante, parece un cosplay, pero de los buenos. Qué diseño. Su Batman es también diferente a lo ya visto, empezando por las botas con hebillas y terminando por el batmóvil. Su Bruce Wayne sin camisa en la batcueva disipa cualquier duda sobre su capacidad para dibujar cuerpos de personas... personas con grandes músculos, obviamente.
UNA ESTRUCTURA DE DIBUJO QUE RECUERDA A LOS LIBROS DE CUENTOS |
La estructura no es la normal, con viñetas cuadradas, sino que recuerda precisamente a esos cuentos ilustrados de Dickens que venden para niños. Grandes viñetas, primeros planos rodeados de ilustraciones, sin bordes, dándole a la parte gráfica un protagonismo brutal que repercute en la inmersión del lector. Por cierto, no olvidar dar el crédito al excelente colorido, obra de la artista Bárbara Ciardo.
Merece la pena que la ojeéis al menos en la tienda de cómics o en el gran almacén de turno. Y si podéis, haceros con él o pedidlo de regalo, porque no será la mejor historia de Batman, pero sí de las más especiales. Y desde luego, de las mejor dibujadas.
BATMAN: NOEL
ECC Ediciones
Guión: Lee Bermejo
Dibujo: Lee Bermejo
Color: Bárbara Ciardo
Formato: cartoné, 112 páginas
Precio: 13,50 €
BATMAN: NOEL
ECC Ediciones
Guión: Lee Bermejo
Dibujo: Lee Bermejo
Color: Bárbara Ciardo
Formato: cartoné, 112 páginas
Precio: 13,50 €
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