AMERICAN HORROR STORY. EPISODIO 1. LA CRÍTICA

Sin mucho retraso respecto a los USA acabamos de ver el primer episodio de American Horror Story, por supuesto en un canal de pago.  La serie ha sido creada por Ryan Murphy y Brad Falchuk, creadores también entre otras de Glee y Nip/Tuck...y se nota. Pero vayamos por partes. El padre, el atractivo psiquiatra Ben Harmon (Dylan McDermott) y su mujer Vivien
(Connie Britton), tras sufrir una severa crisis en su matrimonio deciden que la mejor solución es mudarse a California para empezar de nuevo, llevando a su repelente hija adolescente (Taissa Farmiga) con ellos. Su nuevo hogar, adquirido a precio de ganga debido a unas misteriosas muertes acaecidas en el caserón, será el escenario de los sucesos que acosarán a la familia Harmon.

LA NO TAN TÍPICA FAMILIA HARMON

Ya en el principio del capitulo piloto nos muestran los sucesos terroríficos que ocurrieron en la casa allá en 1978, y que nos ponen en antecedentes de lo que veremos luego. Aviso, no estamos ante suspense, sino que todo es bastante explícito, aunque sin pasarse. No es que los creadores hayan inventado nada, pues los recursos utilizados ya han sido explotados anteriormente, incluso acumulando muchos de ellos, desde la inquietante niña con síndrome de Down a los niños mellizos repelentes. Utilizar niños en las películas y series de horror llega ya incluso a cansar. Por no hablar de que todo sucede en una casa "encantada".

FOTO PROMOCIONAL DE AMERICAN HORROR STORY

Tras este preámbulo comienzan a presentarnos a los personajes secundarios, que parecen venir incluidos con el lote de la casa. El primero de ellos es la madre de la niña discapacitada, Constance, una tremenda Jessica Lange que no oculta su frustrada vida a su vecina; y el ama de llaves que siempre da mucho juego y que es vista curiosamente de manera diferente por el marido y el resto de la familia. No olvidemos la inquietante aparición del hombre desfigurado que avisa a Ben del peligro que corren si permanecen en  la casa. Si todo esto no te lo cuentan bien, podría dar risa tal acumulación de tópicos y lugares comunes ya vistos cientos de veces...pero no la da. La serie está muy bien rodada, y los diálogos son bastante creíbles, así que hasta ahora, al menos, no han caído en el pastiche.

LA SIRVIENTA CALENTANDO SIN NECESIDAD DE ENCENDER LA CHIMENEA

Se nota la mano creadora de la serie en la estereotipado de los adolescentes que aparecen, planteando situaciones y personalidades agresivas y controvertidas, tal y como ocurre en Glee. En contrapartida el matrimonio protagonista es bastante creíble, y con edades similares, algo raro de ver en otras producciones. Lo que sí se podrían haber ahorrado era el motivo de la crisis matrimonial, pues se nota metido con calzador, y más con una hija adolescente, para justificar la mudanza. Todo esto se nos antoja bastante improbable, la verdad, pues como todos sabemos los adolescentes son bastante reacios a las mudanzas, la menos en las series americanas. Otro elemento improbable es que personas normales aguanten la sucesión de hechos extraños y bizarros que se suceden en la casa sin salir corriendo de ella en el primer capítulo. Todo parece cogido muy por los pelos para aguantar el armazón de la trama.

JESSICA LANGE

Pero si dejamos de lado la incredulidad de dicha premisa y nos centramos en la trama sobrenatural debemos decir que más que terrorífica es perturbadora. El hecho de presentarnos uno de los personajes (la sirvienta) visto de distinta manera según el miembro de la familia que lo vea no es un elemento de horror, más bien produce extrañeza e inquietud. Los guionistas juegan con la acumulación de elementos extraños y casi surrealistas (la asistente "provocativa", el sujeto enfundado en un traje de sadomaso...) para crear un ambiente que pretende asustarnos y que consiguen a medias.

Da la impresión que ante tal acumulación de elementos desde el primer episodio, no nos explicamos cómo van a alargar las tramas. Con sólo un capítulo parece que ya hemos visto media temporada. De todas formas, el capítulo mantiene su interés, con unas actuaciones de calidad, especialmente una Jessica Lange muy envejecida que representa a la perfección el papel de vecina intrigante y con aires de diva decadente.

LA VERDADERA MANSIÓN DATA DE 1908

Si os gusta el terror aderezado con elementos perturbadores y casi surrealistas, American Horror Story es vuestra serie. Si estáis acostumbrados a las películas de horror con mayúsculas, con sustos continuos, quizás American Horror Story os defraude un poco pues los creadores juegan más con el elemento extraño e irreal que con el miedo puro. Habrá que estar pendiente de cómo evoluciona esta serie para ver si al final asistiremos a un drama familiar surrealista o una serie de horror al uso.